El pasado mes de diciembre el libro “No + Pálidas. Cuatro actitudes para el éxito”, en su vigésima primera edición, alcanzó los 40.000 ejemplares vendidos.
~
Como se menciona en el libro: “El éxito no es un destino. Nunca se llega. Es un viaje, siempre se está en el camino, siempre se está construyendo.” Y eso es así, porque cuando el éxito se define como destino, se atraviesa la fina línea que separa a la confianza de la soberbia.
El pensar que “llegamos” es asumir que “ya está”. Que no se necesita más esfuerzo y que tenemos garantizada la cúspide. Es lo contrario al cultivo del valor de la excelencia. Le pasa a las personas. Le pasa a las organizaciones. En un mundo veloz y competitivo, esa es la receta del fracaso.
Por eso, para invitarlos a seguir construyendo, queremos aprovechar esta oportunidad para repasar los principales conceptos de las cuatro actitudes desarrolladas en No + Pálidas, que son las condiciones necesarias para poder seguir haciendo el viaje.
Actitud Positiva
“Las personas más efectivas y, por lo tanto, con más capacidad de logro, en mi experiencia, son aquellas que usan toda su energía en las cuestiones que ellos perciben que pueden resolver. No quiere decir que se dedican a las cosas simples o fáciles.
Por lo general, aquellas personas que son capaces de minimizar la pérdida de energía que generan las pálidas, se embarcan en tareas y proyectos que otros piensan que son imposibles. Son quienes se ponen metas que otros piensan que no se pueden lograr o que son una locura.”
Actitud de Equipo
“Un equipo es un grupo de personas unidas por un propósito común, como ganar un campeonato, filmar una película, ganar una elección presidencial o producir motores para aviones. En los equipos ganadores cada individuo juega un papel, aporta su fortaleza distintiva, pero también colabora en la construcción de una personalidad colectiva, dada por lo que los miembros quieren lograr juntos. Los individuos colaboran para que brille el equipo y en el proceso afirman su identidad individual.
Los equipos ganadores no disuelven las identidades de cada miembro, por el contrario, las realzan y las integran en una entidad colectiva superior. En estos equipos los talentos, las habilidades y la fuerza de cada uno de los individuos, se complementan, se fusionan y se multiplican. Y esta capacidad expandida permite a cada miembro conseguir un resultado superior al que habrían sido capaces de conseguir por separado.”
Actitud de Mejora Continua
“Controle su destino o alguien lo hará por usted, es el título de uno de los libros sobre el trabajo de Jack Welch, uno de los más admirados directores ejecutivos y claramente uno de los más grandes empresarios del siglo XX. Con el título del libro alcanza para entender por qué la actitud de mejora continua es hasta un tema de supervivencia. Las personas con actitud de mejora continua buscan controlar su vida, controlar su destino. Y para lograrlo:
- Se preguntan “¿no habrá una mejor manera de hacer esto?”
- Aceptan y buscan el cambio porque lo consideran una oportunidad
- Cuestionan todo
- Se cuestionan a sí mismos
- Saben que la prosperidad no se hereda
- Mejoran sus habilidades, se desarrollan a sí mismos
- Son responsables de su superación personal”
Actitud de Responsabilidad
“Las personas que florecen y tienen éxito se sienten dueñas de sus éxitos y también de sus fracasos. Entienden que son los resultados y no los esfuerzos los que se pagan. No le echan la culpa a otros o a la suerte cuando no les va bien. Tienen el coraje y la valentía de reconocer sus fallas, identificar sus errores y tratan de no repetirlos. Las personas con actitud de responsabilidad muestran las siguientes características:
- Aceptan sus errores
- Contagian energía
- Se preguntan ¿si no somos nosotros, quiénes?
- Se involucran
- Expresan de forma verbal y clara su responsabilidad
- Creen firmemente en la frase “no hay peor gestión que la que no se hace”
- Se sienten parte, se sienten dueños.”
~ Enrique Baliño
Respuestas